Ahora que he destinado mi conciencia a regalar un arte, al obsequio de pedazos míos, a ser pensado grandemente y a destajo, me parece sobre todo que despilfarro el último avituallamiento de esperanza, y que despojo al ser de irresistibles energías que infunde el dinero. Y soy desganado, es cierto, un poco tonto; y tengo hambre, es verdad, pero soy libre en el discurso.
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5 comentarios:
No eres tonto...bueno a veces jajajajajaj
no mentira amigo de poeta, son bromas...lalalala de verdad, tienes que creerme
hablando en serio
Eso de Not seller me refiere una sugerencia a Best seller o Long seller: todos terminos editoriales para nombrar el como se vende un libro. Por otro lado, en el texo planteas que no te vendes, y eso me parece gracioso: la publicidad google que tienes al lado derecho de tu blog me plantea dudas. Para ser sincero, siempre te he considerado un vendido, como los arbitros del futbol poblacional. Pero es muy cierto: la incoherencia ntre discurso y acto es lo natural a los hombres; lo inhumano, lo raro, lo fantástico, es la coherencia. Bien dices: ¡Solo se puede ser libre en el discurso; en el acto somos víctimas de la pasión del cuerpo!
Yo no entendí demasiado, quizás bastante, creo que lo suficiente, y me quedo con el sonido de tus textos siempre perfecto, como la música. Gracias por esos pedazos.
"libre en sus pasos, esclavo de sus sueños"
lea Jaime Gil de Biedma, gran autor, al igual que Juan Eduardo Cirlot.
=]
koni.
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